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El síndrome pulmonar por hantavirus (SPH) es causado por un virus que reside principalmente en el ratón silvestre de patas blancas (Peromyscus maniculatus). Por encima, el ratón es de color moreno o café y por debajo es de color blanco; las orejas son grandes. Los roedores infectados segregan el virus en la orina, el excremento y la saliva. Los humanos se infectan al respirar partículas del virus que circulan en el aire, y al tener contacto directo con los roedores, sus excrementos o sus nidos.
Aunque el hantavirus es raro, es fatal en aproximadamente el 40% de los casos.
Desde el momento de exposición al virus hasta cuando aparezcan los síntomas (el período de incubación) pueden pasar de una semana a seis. Típicamente, los síntomas aparecen en un promedio de dos a tres semanas después de la exposición.
Los primeros síntomas se parecen mucho a una gripe e incluyen fiebre, escalofríos, dolor de cabeza y dolores severos en los músculos, especialmente en la parte inferior de la espalda y en las piernas. Hay dolor severo en el abdomen, las coyunturas y la espalda, y, posiblemente, nausea y vómitos.
Dentro de 1 a 5 días después del comienzo de los síntomas, la persona empezará a toser, sentir falta de aire, y respirará con dificultad a causa de la acumulación de líquido en los pulmones. Esta condición puede progresar hasta amenazar la vida con un fracaso respiratorio.
Es raro que haya dolor de garganta, chorrera de nariz, ojos lagrimosos, estornudos, o erupciones en la piel. Estos síntomas indicarían que la enfermedad tendría otra causa.
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Personas que viven, trabajan o visitan en zonas rurales.
- Personas que han sido expuestas a grandes números de roedores.
- Personas que limpian establos, edificios accesorios, graneros; o que eliminan matorrales, plantas, y practican jardinería.
En la actualidad no hay una droga efectiva contra el SPH. Cuando se sospecha el SPH o se confirma, es importante ser admitido lo más pronto posible a un hospital donde puede haber monitoreo cuidadoso, tratamiento de los síntomas, y terapia apropiada. Si ha sido usted expuesto a roedores, y siente los síntomas mencionados, informe a su médico de la exposición. Un diagnóstico temprano ayuda que el médico pueda realizar efectivamente el tratamiento.
PREVENCIÓN ES LA CLAVE PARA EVITAR EL HANTAVIRUS
Protección de la casa, el taller y el establo contra roedores
- Tape los agujeros y grietas con fibra o estropajo de alambre, plancha de metal, metal estirado de malla fina, o mezcla de parchar. Asegure que los burletes debajo de las puertas estén bien apretados, y que las mallas de las ventanas estén en buenas condiciones.
Eliminación de acceso a comida
- Guarde en vasijas de metal el alimento de los animales de casa.
- Déle a los animales no más alimento de lo que comerán, y déselos solamente durante el día.
- Recoja toda la comida y el grano que haya caído en el suelo.
- Lave los utensilios de comer, y barra el piso todos los días.
- Ponga tapas seguras y apretadas en los basureros.
Limitación de los sitios de anidamiento
- Hay que limpiar acumulaciones desordenadas y basura, eliminar malezas, y apartar leña acumulada, vehículos abandonados, y materiales de construcción.
- Guarde maquinaria, heno y leña a 100 pies de cualquier edificio o habitación.
- Guarde la leña en un depósito levantado del suelo.
Control continuo sobre los roedores
- Dentro de casas o edificios utilice ratoneras de resorte (snap trap) cebadas con una mezcla de avena y mantequilla de cacahuate.
- Al aire libre utilice ratoneras de resorte, multi trampas (multi catch traps) de jaula, o veneno.
- Utilice guantes de goma o hule cuando esté disponiendo de los animales muertos. Coloque los cuerpos en una bolsa de plástico y deposite la bolsa en el contenedor exterior de basura.
- Mantenga un ambiente que favorezca a los predadores naturales (halcones, lechuzas, zorros, etc.).
Cuando se limpian edificios infestados con roedores, se deben tomar las siguientes precauciones
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Utilizar una solución desinfectante de blanqueador de cloro y agua (1 taza de blanqueador por cada galón de agua).
- Utilizar guantes de goma o hule.
- Abrir puertas y ventanas para permitir que circule el aire de afuera por 30 minutos antes de limpiar o trabajar por dentro.
- Rociar con desinfectante el excremento, los materiales de anidamiento y los animales muertos. Dejar que el desinfectante penetre por 5 a 10 minutos antes de limpiar con un trapeador (limpiador), una esponja, o una aspiradora con agua. ¡NO SE DEBE BARRER NI UTILIZAR UNA ASPIRADORA SECA PARA LIMPIAR EL EXCREMENTO!
- Para disponer de un ratón muerto, o de materiales contaminados hay que desinfectarlos como se dijo anteriormente, meterlos en una bolsa sellada de plástico, y colocarlos en un contenedor exterior de basura.
- Si el edificio está muy infestado, o si no se puede ventilar completamente, utilice un respirador. El respirador debe tener contacto hermético con la cara, y debe llevar un filtro HEPA (clasificación N–100 NIOSH).
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