Haciendo la llamada
Todo comenzó en la noche del domingo, 8 de octubre de 1871. Por culpa de una vaca que pateó una linterna en el granero de la Sra. O’Leary, el fuego se propagó rápidamente. Durante dos días, el fuego mató a 250 personas, dejó a 90,000 sin hogar y destruyó casi la tercera parte de la ciudad. La gente dijo que los escombros del incendio cayeron del cielo como nieve roja, cubriendo la pradera por millas a la redonda.
Hay muchas leyendas relacionadas con el Gran Incendio de Chicago, pero la realidad es que en aquellos días, las emergencias a menudo se convertían en tragedias. En 1871, los departamentos de bomberos acarreaban su propia agua usando caballos y la bombeaban a mano. La gente daba notificación de las emergencias enviando a alguien al departamento de bomberos. Muchos de los que acudían eran voluntarios y no estaban entrenados para combatir incendios.
Es difícil imaginar que un incendio de ese tamaño suceda hoy en día. Muchas casas tienen detectores de humo y extintores de incendios y están conectadas a los sistemas públicos de agua. Los edificios públicos tienen sistemas de aspersión automáticos y sistemas de comunicación rápida con personas entrenadas para combatir incendios y proveer primeros auxilios.
Uno de los grandes cambios en el manejo de emergencias ocurrió a finales de la década de los 60. Se desarrollaron sistemas telefónicos para que las llamadas al 9-1-1 se conectaran automáticamente con los operadores locales (policía, bomberos, servicios de ambulancias).
En el 2001, casi todos los condados de los Estados Unidos ya tenían el servicio de 9-1-1 en sus teléfonos tradicionales. Los condados sin el servicio de 9-1-1 generalmente se encuentran en áreas rurales en las que hay pocas personas.
En la década de los 80, muchas áreas comenzaron a adoptar el sistema 9-1-1 mejorado. Este sistema rastrea automáticamente de dónde vienen las llamadas. El operador mira en una pantalla de computadora el número de teléfono y la dirección de la persona que llama tan pronto recibe la llamada. Para que este sistema funcione en las áreas rurales, todas las casas deben tener una dirección estandarizada (nombre y número de calle).
Muchas áreas en los Estados Unidos todavía no tienen el servicio de 9-1-1 mejorado. Siempre es bueno que sepas tu número de teléfono y dirección en caso de que el operador los necesite.
Los teléfonos inalámbricos, como los teléfonos celulares y los teléfonos móviles, pueden ser un problema durante situaciones de emergencia. Aunque los mismos sean convenientes, los teléfonos inalámbricos en la mayoría de las áreas no tienen el sistema de 9-1-1 mejorado. Todos los miembros de la familia deben saber su ubicación y el número de teléfono móvil o celular cuando usen el teléfono inalámbrico durante una emergencia. En 1999, los estadounidenses hicieron 190 millones de llamadas al 9-1-1.
Una de cada cuatro de esas llamadas provino de un teléfono inalámbrico.
El lado oculto
Los sistemas de rescate de hoy todavía tienen un punto débil: confían en que las personas respondan de las formas adecuadas. Una buena respuesta a una emergencia no puede prevenir que ocurra una tragedia, y no puede hacer que una ambulancia llegue antes. Lo mejor que puedes hacer en una emergencia es mantenerte calmado y saber qué debes hacer.
LO QUE DICEN LOS NÚMEROS
Muchas granjas, muchas emergencias
Las granjas pueden ser un lugar excelente para vivir, pero también tienen muchos peligros que no se encuentran en ningún otro lado. Por eso es importante que los niños que viven en granjas sepan qué hacer durante una emergencia. Tú podrías ser la primera persona en el lugar de los hechos –la primera en responder – quien tiene el trabajo más importante en una emergencia. Lo que pasa en la primera hora después de que alguien se lastima puede ser la diferencia entre una lesión fácil de tratar o una que amenace la vida de alguien. Los trabajadores de rescate le llaman a ésta “la hora de oro”. Al ser la primera persona en responder, tu trabajo será ver lo que ha pasado y obtener ayuda lo antes posible.
Muchas granjas están en áreas aisladas y los bomberos, la policía y los servicios de ambulancia pueden estar ubicados lejos. Las lesiones también pueden ocurrir en las áreas remotas de la granja, como el campo, o en un edificio alejado de la casa. Es por esto que el trabajo de la primera persona en responder es tan importante.
Muchas labores de la granja se realizan afuera, así que el clima puede ser un gran factor. Debes saber dónde encontrar protección durante una tormenta y cómo mantener a una persona lesionada abrigada y seca.
El fuego también crea un gran peligro para las granjas. El fuego que comienza debido a una chispa de una cosechadora puede esparcirse por todo el campo. El combustible que se derrama sobre un motor caliente puede prenderse. Los incendios pequeños pueden rápidamente convertirse en incendios grandes, así que siempre es mejor obtener ayuda.
Otras emergencias que pueden suceder en la granja pueden involucrar al ganado y otros animales, espacios cerrados como depósitos de granos, silos, fosos de estiércol así como resbalones y caídas desde edificios o equipo agrícola alto, o caídas dentro de pozos sin cubiertas o estanques. Como la primera persona en responder, tu trabajo después de conseguir ayuda puede ser diferente, dependiendo de cada situación.
Aquí hay unas reglas que debes seguir:
Y la regla de oro durante la hora de oro para la primera persona que responde es: ¡NUNCA te arriesgues tratando de ayudar a otra persona!
LISTOS para responder
Una familia que está lista para responder a situaciones que involucran lesiones tiene botiquines de primeros auxilios en lugares clave. Cada miembro de la familia necesita saber en dónde puede encontrar los botiquines y poder alcanzarlos.
Cada botiquín debe tener una lista de números telefónicos de emergencia, un folleto de primeros auxilios y suministros. Los botiquines de primeros auxilios no se usan para dolores simples (como dolores de cabeza), por lo que sólo deben tener artículos para lesiones fuertes. Cada botiquín posiblemente tendrá antiséptico, vendas comunes, vendas de compresión, cinta adhesiva, tablillas y bolsas plásticas.
Estar listo para responder a las situaciones de emergencia va más allá de saber en dónde encontrar los botiquines de primeros auxilios. Debido al tiempo que le puede tomar a los servicios de ayuda llegar, la forma en que tú respondas será crítica.
Primero, permanece calmado y revisa el área. ¿Se ha caído un cable eléctrico? ¿Hay un animal furioso suelto todavía? Nunca te expongas a un peligro.
Después, evalúa la emergencia. Nunca muevas a alguien que esté herido, si la persona está inconsciente, necesitas conseguir más ayuda. Si otras personas están a tu alrededor, envíalas para que busquen ayuda mientras tú te quedas con la persona lesionada, o ve tú mismo por ayuda. Siempre trata de mantener a una persona herida despierta hasta que llegue el personal de emergencia.
Cuando llames al personal de emergencia, permanece en la línea. Debes estar listo para indicarle al operador en dónde te encuentras, cuál es el problema, cuántas personas están heridas, tu nombre y número telefónico, y responder a otras preguntas que te haga el operador.
El clima inclemente trae peligros especiales. Pero tenemos la ventaja sobre estos peligros naturales cuando estamos preparados para recibirlos y comprendemos la ciencia que está detrás de las condiciones extremas del clima.
Electricidad. La ciencia nos ha ayudado a deshacernos de muchos de los mitos acerca de los relámpagos o rayos, y así podemos evitar electrocutarnos. Hemos aprendido que los rayos pueden caer en el mismo sitio dos veces, que no es necesario que esté lloviendo para que te pueda caer un rayo y que nunca debes acostarte por completo en el suelo si estás afuera durante una tormenta eléctrica. A continuación hay un par de datos interesantes:
Durante una tormenta eléctrica, siempre es buena idea buscar refugio en un edificio cerrado, en autos o en buses (pero no toques ningún metal). Si no puedes ir afuera, agáchate doblando tu cuerpo y colocando tus pies en puntillas y juntos.
Agua. El agua es una fuerza poderosa de la naturaleza. La misma energía que corta barrancos dentro de las cordilleras de montañas de granito, también es capaz de expulsar a los vehículos de las carreteras y de colocar a las personas en peligro durante las inundaciones. El agua que fluye por el Cañón Negro del Gunnison en Colorado, tiene suficiente fuerza para levantar y acarrear piedras hasta de 6 pies de diámetro. Esa misma fuerza trabaja en áreas bajas después de una lluvia torrencial.
El nivel del agua en arroyos con grandes cuencas puede elevarse en pocas horas, acarreando el agua cuesta abajo hacia áreas donde quizá no haya llovido. Si vives en un área baja, siempre es buena idea escuchar las advertencias sobre inundaciones durante y después de las tormentas fuertes.
Frío. La ciudad de Vostok, en la Antártida, tiene el récord de temperatura más bajo – menos 128.6 °F – pero tú no tienes que vivir en el Polo Sur para morirte del frío. Una persona puede morir muy rápidamente cuando la temperatura de su cuerpo baja a menos de 96 °F. Esta condición se llama hipotermia. Los primeros signos son confusión, mareos y temblor incontrolable. Estar afuera en climas fríos también puede provocar la congelación cuando la piel se congela y el frío la destruye. En climas fríos, es buena idea ponerse varias capas de ropa, mantenerse seco (la humedad le quita calor a tu cuerpo) y permanecer adentro en días fríos y con mucho viento.
Calor. Casi 500 personas murieron durante una ola de calor en Chicago en 1995. Las altas temperaturas combinadas con la humedad alta pueden ser una combinación mortal. Las temperaturas cálidas se pueden aguantar cuando hay poca humedad, debido a que nuestros cuerpos sacan la humedad en forma de sudor, el cual se evapora y crea un efecto enfriador. Pero cuando el aire ya trae mucha humedad (humedad alta), es más difícil que el sudor se evapore y nos mantenga frescos. Nuestros cuerpos comienzan a sobrecalentarse y perder energía. Esto puede llevar al agotamiento por calor, calambres por calor, insolación y eventualmente la muerte. En climas cálidos, es buena idea reducir la actividad física, vestir ropa de colores claros para reflejar la luz solar, encontrar un lugar fresco durante la parte más cálida del día y beber agua en abundancia.
P: ¿Por qué apagó Susana la luz?
R: ¡Ella no quería ver rayos!
El Misterio del “Lamento Silencioso”
Samuel no puso mucha atención la primera vez que escuchó el sonido. Probablemente era la televisión en la otra habitación. Pero cuando escuchó de nuevo el lamento silencioso, se preocupó.
El lamento silencioso se volvió más fuerte cuando Samuel abrió la puerta del sótano. Casi no podía entender las palabras que decían: “¡Auxilio, socorro, estoy aquí abajo!”. ¡Era su hermano!
Samuel siguió el lamento hasta llegar a la bodega. Ahí encontró a Juanito de cinco años sobre cacharros que estaban amontonados al lado de una torre de cajas. Al lado de él había un banco que Juanito había usado para escalar la torre de cajas y poder abrir la caja del tope, marcada “adornos navideños”.
“¡Ven por mí!”, gritó Juanito al ver a su hermano mayor.“¡Me duele el cuello!”
Samuel sabía que estaban solos en casa hasta que mamá y papá terminaran sus quehaceres. Él también sabía que no debía tratar de mover a Juanito.“Voy por el teléfono celular y regreso enseguida”, dijo Samuel.
Unos minutos más tarde, Samuel regresó y marcó al 9-1-1. La operadora le hizo muchas preguntas, y Samuel pudo responder las todas. Juanito ya estaba más calmado.
“Has respondido muy bien”, le dijo la operadora a Samuel mientras esperaban a que llegara la ambulancia. “Has sabido exactamente qué hacer, a quién llamar y has permanecido en la línea. Juanito tiene suerte de tener un hermano como tú.”
Tu reto:
¿Por qué no quería Samuel mover a su hermano?
__________________________________________________________
__________________________________________________________
__________________________________________________________
¿Qué hizo en lugar de mover a su hermano?
__________________________________________________________
__________________________________________________________
__________________________________________________________
¿Qué otras emergencias pueden suceder en tu granja en las cuales puedas ser el primero en responder?
__________________________________________________________
__________________________________________________________
__________________________________________________________
Cualquier persona puede ser víctima de un incendio en cualquier momento. Hannah, Cris y Camy, del Club Misterio, encontraron un tipo diferente de incendio. Por suerte, todos sabían dónde encontrar el extintor debido para apagar el fuego. Usando la tabla de abajo, ¿puedes descubrir qué vio y qué hizo cada persona?
CLAVE: Cuando pongas un asterisco (*) en una casilla, coloca un cero (0) en las otras casillas de esa columna y fila.
¿Quién? | ¿Dónde estaba el fuego? | ¿Cuál extintor necesitaron?* | ||||
Cerca de Madera | Tostadora | Combustible regado cerca de la cortadora de césped | Tipo AB | Tipo ABC | Tipo C | |
Hannah | ||||||
Cris | ||||||
Camy |
* Un inspector de seguridad muy listo sabe que el extintor Tipo ABC se puede usar en la mayoría de los incendios. El Tipo C es solo para incendios eléctricos, el Tipo B es solo para incendios que involucran combustibles o líquidos inflamables y elTtipo A se usa con otros materiales combustibles ordinarios como madera y papel.
RESPUESTAS: Hannah usó el extintor Tipo AB en la cortadora de césped. Cris usó el extintor Tipo ABC en la cerca. Camy usó el extintor Tipo C en el tostador.
Escrito por Charles V. Schwab, profesor asociado y especialista en seguridad del Servicio de Extensión; Laura J. Miller, especialista en comunicaciones de Safe Farm [Granja Segura]; y Lynn Graham, profesora asociada del Departamento de Desarrollo Humano y Estudios de la Familia. Diseñado por Juls Design, Ankeny, Iowa.
El Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA) prohíbe la discriminación en todos sus programas y actividades basada en raza, color, origen nacional, género, religión, edad, discapacidad, creencias políticas, orientación sexual y estado marital o familiar. (No todas las bases de prohibición aplican a todos los programas.) Muchos materiales pueden obtenerse en formatos alternos para clientes de ADA. Para entregar un reclamo por discriminación, escriba a USDA, Oficina de Derechos Civiles, Room 326-W, Whitten Building, 14th and Independence Ave. SW, Washington, DC 20250-9410, o llame al 202-720-5964. Publicado para promover el trabajo de Extensión Cooperativa, Actas del 8 de Mayo y 30 de Junio, 1914, en cooperación con el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos. Stanley R. Johnson, director, Servicio de Extensión Cooperativa, Universidad Estatal de Iowa para Ciencia y Tecnología, Ames, Iowa. Archivo: Salud & Seguridad 2-2.
Publication #: PM 1877d (S)
Disclaimer and Reproduction Information: Information in NASD does not represent NIOSH policy. Information included in NASD appears by permission of the author and/or copyright holder. More